Como os decía, soy una afortunada y tengo cerca
personas que me ayudan a cumplir un sueño. Alma de superhéroe no tiene sólo una
portada bonita; tiene también un prólogo bonito.
Gracias, Rocío. Porque sin tus palabras, este sueño
habría quedado incompleto. No podría estar mejor expresado, no podría ser más
bonito. Y no podría haber sido nadie más que tú.
Es un verdadero placer, y una suerte, compartir esto
contigo. Como tantas cosas desde hace tanto tiempo. El trébol irlandés me dio
toda la suerte al ponerte ahí, y sobre todo, al dejarte para siempre.
Gracias, gracias, gracias.
Para que veáis la suerte que tengo, y lo bonita que
es Rocío, os dejo un trocito de su prólogo:
“Cada relato es
un regalo: “Esto es lo que viví”; “Esto es lo que aprendí”; Y te lo ofrezco...
Que cada cual lo recoja como mejor sepa. Lo aplique o no. Lo tenga en cuenta o
no lo valore. Cada relato es una llamada a nuestros sentimientos más vitales:
toc-toc; así me sentí; así viví; así me crearon y me destruyeron; así me amaron
y así amé; así me rompí el alma... Así dejé ir.”
Eso es una pequeña muestra de cómo ella ha sentido
Alma de superhéroe. Y estoy deseando que lo sintáis todos y todas.
Ya queda menos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario